¡Sí, sí, sí!, pedal a pedal, desde el cole, a las 8 de la mañana, nos hemos ido a la cafetería "El Brillante", en Bravo Murillo, donde nos hemos puesto las pilas energéticas para la pedalada posterior: churros, porras, chocolate y alegría para conmemorar estos cuatro años, este quinto curso, que llevamos en el proyecto. Con los morritos manchados de chocolate, descandamos y fuimos al Jardín Botánico de la Ciudad Universitaria. Perales chinos, cedros, pinos chilenos, rosales... De todo veíamos cuando buscábamos los árboles propios de Madrid: la encina, el roble y el pino. Hojas verdes, amarillas, naranjas, marrones... Un carnaval de colores del otoño. Luego volvimos al colegio. La idea era entrar a las 11 y 11 del día 11 del 11 del 11, pero un par de cuestas se encargaron de ralentizar nuestra marcha y ese minuto mágico nos pilló... ¡pedaleando!
Los niños del Zuloaga sí que saben que Madrid, en bici, es posible.