¿Seríamos algo supersticiosos si hiciésemos notar aquí que el año que hubiésemos cumplido 13 años de proyecto fue cuando el COVID inundó nuestras vidas?
No hay respuesta para gatos negros que se cruzan en nuestra pedalada o escaleras abiertas por las que no deberías pasar, lo cierto es que este año sí pudimos celebrarlo. Y nos vengamos por no haberlo podido hacer el pasado. ¿Y cómo? Pues muy fácil: juntando a 92 entusiastas, madrugadores, bicibuseros y llevándoles a desayunar el ya típico chocolate con churros o porras. Nuestro magnífico Bicichurro anual.
Como podéis imaginar, la organización fue extremadamente compleja. Bueno, podría no haberlo sido, por supuesto, si lo hubiésemos hecho inundando la calzada así, a lo bravo, cada niño con su padre o madre, al mogollón, y que Dios reparta suerte, o inundando la calzada así, no tan a lo bravo, con policía abriendo y cerrando el pelotón, pero nosotros, tan educaditos y pulcros con las normativas de tráfico, siguiendo la máxima de que "somos tráfico" (con las desventajas que esto, a veces, seamos honestos, puede suponernos) definimos 5 subgrupos en el megagrupo con un adulto líder y otro de cierre, para cuando los semáforos nos cortasen, además de otros que jalonaban cada subgrupo para equilibrar energías. Cada uno sabía quién era su pareja con antelación, cada pareja sabía su posición en el subgrupo con antelación. Cada líder había estudiado el itinerario con antelación. ¿Y cómo salió la experiencia? Bruteitid, of course.
Durante dos horas estuvimos pedaleando de aquí para allá, avispero ciclista, recogiendo niños y niñas y, a las 9:30, llegamos al cole, dejamos las bicis y nos fuimos a la Cafetería Numancia, donde ya sabían cuántos íbamos a ir, a qué hora y qué iba a tomar cada uno. Una de las mamás del cole, que trabaja allí, nos tenía todo estupendamente preparado: un área diferente para cada uno de los grupos de edad (pezqueñines, los de cuarto, los de quinto y los de sexto, por lo del covid, claro), el chocolate a la taza a punto y las montañas de churros y porras listas para ser devoradas. Los adultos acompañantes (¡21 personas!, entre las que se encontraban miembros de Pedalibre y otras asociaciones vecinales) ayudamos a servir a tanto pequeñajo termita. Y luego, a clase, a regocijarnos de la magnífica experiencia vivida. ¡Ñam, ñam, ñam!
Qué rico, qué bien, qué suerte estar en el Zuloaga. Y tener tantos bicibuseros. Y tantos ayudantes. Y que haya bicicletas en el mundo. Y churros. Y porras.
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Nada malo nos podía pasar bajo la protección de Mazinger Z. |
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Espectacular cronograma |
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El primer bicibusero recogido, apenas abiertas las calles
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El grupo 1 llega al cole. |
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Preparándonos, tras la primera tanda recogida, para ir a por los demás. |
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Descansito previo en la Dehesa de la Villa, para dar tiempo a que en el cole no coincidiésemos con la entrada de los cursos. |
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Tuve que subirme a un banco, con el amplificador, para que todos me oyesen. |
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La manera en que Ana decoró su bici. Buena idea para el año que viene. :) |
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Un microgrupo se acerca al punto de recogida. |
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Ready to go! |
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El pelotón ha sido cortado (a lo lejos se ve venir a los demás). No pasa nada. |
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¡Ahí viene la Plaga, le gusta pedalear! |
Contando ovejitas antes del desayuno.
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Y aquí, contando churros. |
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Tan ricamente |
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Algunos de nuestros magníficos colaboradores. |
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La zona devastada de los de cuarto |
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Estooooo, y yo, ¿dónde pongo mi bici, profe? |
Estimado Walter,
ResponderEliminarSoy Abraham López Morales, maestro de EF del CEIP San José de Calasanz, uno de los centros roteños que organizamos el BiciBús.
En primer lugar felicitarte una vez más por la iniciativa y la "puesta en escena" de tan maravillosa propuesta.
Nosotros llevamos tan sólo tres años (con el confinamiento de por medio) llevando a cabo la hermosa experiencia que con tanto agrado e ilusión acogimos cuando tuvimos el placer de escucharte en aquella charla. No cotamos obviamente con toda la experiencia que atesoráis, y también algún que otro "obstáculo" nos encontramos en nuestro centro para desarrollarla, pero sí es cierto que poco a poco se nos van sumando familias y el interés está creciendo entre la población de Rota.
Ojalá pudiéramos hacer muchas más cosas de las que hacemos, al igual que también nos encantaría poder seguir vuestros pasos tal y como lo planteáis desde el centro, con toda la preparación previa, las pruebas de habilidad, etc., pero como te digo, hacemos lo que podemos, y a veces, como suelo decir, "más de lo que nos dejan" (jajajaja).
Al igual que hacéis en vuestros desplazamientos, nosotros también intentamos funcionar haciendo ver que "somos tráfico", y por eso mismo en la gran mayoría de las ocasiones las personas adultas que acompañamos al alumnado, tenemos que meternos en las rotondas y "cortar el tráfico" para hacerles ver a quienes conducen vehículos a motor (incluidos autobuses urbanos) que al ir en grupo somos un único vehículo, y deben respetarnos; ocurre igual en muchos cruces con señal de "ceda el paso" o "STOP". No todos los vehículos respetan esta norma, algo que sí hacemos en el BiciBús. Todas y cada una de las personas participantes tienen muy claro que lo principal es el respeto a las normas de tráfico, porque si queremos que nos respeten, lo primero que debemos hacer es respetar y sobre todo dar buena imagen. Por eso mismo insistimos también y obligamos a todo nuestro alumnado a circular por ejemplo con chalecos reflectantes (y obviamente con casco), y algo que la gran mayoría de personas adultas acompañantes también asume. Nuestra máxima es "respetar para que nos respeten, y hacernos ver para que nos cuiden".
Poco a poco hemos ido mejorando en el funcionamiento y organización de los recorridos, aunque de momento no hemos llegado a movilizar a tantas personas circulando juntas en un mismo día como en vuestro centro, pero sí es cierto que es tanta la demanda y el interés que en varias ediciones hemos tenido que organizar el BiciBus en tres días consecutivos, para reducir el número de participantes y que todo funcionara mejor, y principalmente por no poder contar con un espacio tan amplío como para poder dejar 80 o 90 bicicletas de una misma tacada.
Me reitero en mis felicitaciones por tanto bueno hacer, y con todo mi respeto y admiración os agradezco que podáis seguir transmitiendo tan buenas prácticas educativas y saludables entre vuestro alumnado y sus familias.
De momento seguiremos aprendiendo con la esperanza de poder llegar a los 14 años de experiencia de vuestro centro, y hacerlo alcanzando vuestro alto nivel.
Y ya para acabar con un poco de humor, comentarte que de momento "Dios se ha portado bien repartiendo suerte", jajaja.
Me despido dándote las gracias por habernos mencionado en la entrada de tu blog. Para nuestro centro es todo un honor poder aparecer como experiencia educativa junto a localidades tan importantes como Madrid o Barcelona. Por cierto, en nuestro centro tampoco nos gusta la idea catalana (más bien de Barcelona) de que la policía abra y cierre el pelotón, porque le pese a quien le pese, como bien dices, "somos tráfico". Y si al colegio van decenas de coches y la policía nos les "escolta", por qué iban a tener que hacerlo como nosotros si al igual que esos vehículos también "somos tráfico".
Un abrazo y a seguir dando pedales.
Abraham
Buenas tardes, Abraham. Lo primero es pedirte disculpas por el larguísimo lapso de tiempo entre tu comentario y mi respuesta. Lo cierto es que, tras años de subir entradas, y no recibir nunca comentario alguno, me había olvidado de echar un vistazo a esa sección. Lo segundo es felicitarte por el empeño que, me consta, estáis haciendo por visibilizar el uso de la bici en vuestra localidad, incluirla en el proyecto educativo de vuestro centro y, por ende, transmitir cultura ciclista en Rota. Es verdad que en esta entrada os mencioné, al principio -tanto a vosotros como al ejemplo catalán- como otras formas de realizar bicibuses, sin el respeto debido (de ahí que, algunos días después, reflexionándolo, eliminase dichas menciones de la entrada) tras ser consciente de que no todos los bicibuses han de hacerse siguiendo nuestro modelo. Que cada cual estime y evalúe su metodología bicibusera y los frutos que la misma da. En cualquier caso, mucho ánimo con el proyecto y a seguir pedaleando con toda la suerte que podáis, podamos, recibir de cualquiera de los dioses o diosas que así lo estimen preciso. Un abrazo. Walter.
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