El día en que hubiésemos querido celebrarlo, la semana pasada, no pudimos, debido a la lluvia (qué maravilla de motivo, no hay mejor manera de rendirle tributo que ver cómo la tierra se empapa y esponja de agua), así que decidimos pasarlo para la semana siguiente.
El viernes 29 si pudimos, y lo hicimos. ¿Cómo? Yendo al Huerto Zuloaga, donde nos esperaban algunos de los responsables de su mantenimiento, crecimiento y florecimiento, tomando unos churritos y bailando danzas, ¡Eha, eha, eha, eha! tribales, en círculo, en honor a las gran sustentadora.
Kubele, Magna Mater, Pachamama, Gea, Rea, Gaia... No importa el nombre que le demos, importa la toma de conciencia, el respeto, la gratitud hacia la madre tierra y el no olvidar que la necesitamos más nosotros a ella que al contrario...
|
Desenfocados pero ciertos. Riquísimos |
|
De camino al Huerto, en la calle Berruguete |
|
El círculo mágico musical |
|
Llegando al cole |
No hay comentarios:
Publicar un comentario