martes, 19 de marzo de 2024

STARS: Taller de mecánica de bicicletas para 5º y 6º

El pasado jueves, 14 de marzo, tuvimos una nueva edición del taller de reparación organizado por STARS. Como no hay mal que por bien no venga, el cambio climático nos ha permitido disfrutarlo en el exterior, así que lo hicimos en el paso de carruajes, junto a nuestros bonitos murales.

Esta vez el mecánico, Antonio, de Rutas Pangea, se encargó de enseñar a la chavalería a desmontar la rueda trasera en busca de la cámara, con el objeto de buscar pinchazos.

Tallercito de 45 minutos interesante, práctico y muy necesario. La simpatía del monitor, el modo en que trataba a los niños y la ilusión por transmitir sus conocimientos, nos dejó con ganas de más, mucho más. El año que viene, si se puede, repetiremos. 

¡Gracias, Antonio!, ¡gracias, STARS!









TABLÓN: La bicicleta es...

Muchas, muchas cosas. La bicicleta es muchas cosas, por eso no podemos dejar de hablar de ella, de montar en ella, de soñar con ella.

En este mural, hecho por los alumnos de sexto, se recogen citas de lo que, para algunas personas, significa este maravilloso invento. A ver si, leyéndolo, coincides en algunas de sus reflexiones.

PD: La lluvia también quería echarle un vistazo a lo escrito y, bueno, ha creado unas aguas  (literalmente) magníficas en una zona del mural. Arte moderno y natural (muy ecologista él).











lunes, 19 de febrero de 2024

CON BICI AL ZULOAGA, nuestras distintas actividades

Suele ocurrir, para los que estamos todo el día bici arriba, bici abajo, que nos creemos que toda la comunidad educativa (niños, familias, maestros) del Zuloaga sabe en qué consiste cada una de las actividades que realizamos, lo cual, como hemos comprobado, es un error. Por ese motivo, en esta entrada te vamos a informar de cada una de ellas:

BICIBÚS: actividad que se realiza los viernes y que consiste en un itinerario circular (dado que algunos salimos desde el colegio) para ir a buscar al resto de participantes a sus casas y, de esa manera, venir en bici al colegio. Circulamos por la calzada, en parejas, y aplicando con rigor las normas de circulación, con el objeto de que los bicibuseros aprendan a circular en condiciones, integrados en el tráfico, siendo tráfico, sin necesidad de ayuda especial. 

Se realiza gracias a la colaboración de padres y madres del colegio, dura una hora (llegamos al colegio sobre las 9:00) y está diseñada para los niños de 4º, 5º y 6º, aunque los de cursos inferiores también pueden venir (siempre que lo hagan acompañados de un adulto, claro). Para ingresar en esta bonita familia pedaleante, es preciso que los interesados superen una prueba de habilidad y traigan, firmada, la autorización de sus padres (el documento se lo damos nosotros).

BICICLETADA: paseo en bici que se organiza una vez al trimestre, un domingo por la mañana, con muy diversa temática: visitas a museos, exposiciones, parques, etc. Tiene una duración indeterminada (está en función de las condiciones climáticas y destinos elegidos), ocupa la mañana de manera íntegra y va acompañada (siempre que el tiempo lo permita) de un pícnic colectivo. Suelen recorrerse, aproximadamente, diez kilómetros en total. Está programada para los niños de 5º y 6º, con la autorización de su familia, así como para todo aquél que lo desee (sea o no del colegio). Si es un niño de cursos inferiores, ha de venir acompañado de un adulto (y esto supone: una persona con mayoría de edad).

BAJO NUEVOS CIELOS: éste es el proyecto cicloturista del Zuloaga. En estas pedaladas recorremos más kilómetros y en situaciones de mayor dureza (tiempo, distancia, exigencia del terreno), pues el propósito es viajar en bici e ir a pasar un fin de semana fuera de la ciudad, cuando acaba el curso, haciendo vivac (con nuestro saco y esterilla), sobre el suelo y bajo las estrellas. Por ello organizamos alguna bicicletada, durante el curso, para mantenernos en forma, tanto física como psicológicamente.  Dadas sus características, precisa de material concreto y formación adecuada.

Todas estas actividades son gratuitas y, además, el colegio dispone de bicicletas de préstamo para aquellas personas (ya sean niños o adultos) que no tengan. 

Como puedes ver, ofrecemos todas las facilidades del mundo mundial para que no te quedes sin pedalear, si así lo deseas, y para que colabores en el desarrollo de un modelo de movilidad tan necesario como saludable y divertido.



BICICLETADA: Parque Félix Rodríguez de la Fuente, 18-2-24

La mañana amaneció radiante. No hay nada como un buen cambio climático para sumarnos al consejo de Fernando Fernán Gómez en su celebérrima obra: "Las bicicletas son para el verano". Aplicándonos esta máxima, y teniendo en cuenta el permanente verano en que nos encontramos, ¡que nadie diga que no pedalea porque hace frío!

Chascarrillos atrás, vamos a lo que realmente importa, que es el éxito de convocatoria que tuvo la bicicletada, a la que acudieron 31 personas. 

La apuesta no era arriesgada: tan sólo pedalear alrededor de 10 kilómetros (4 y pico de ida, ídem de vuelta) con varios valores asociados (más allá de los ya conocidos: hacer ejercicio, compartir un bonito día con personas de valores afines, apostar por un medio de transporte sencillo, limpio, divertido, etc.) que paso a detallar:

1. Utilizar el carril bici de la avenida de General Perón, pues es importante que se vea que el dinero público invertido en este tipo de infraestructuras ha merecido la pena. Y eso se consigue usándolo siempre que se pueda.

2. Conocer una manera de conectar nuestro barrio con los de Hispanoamérica (donde está situado el parque al que íbamos), Canillas,  Hortaleza y Alameda de Osuna (en el que se encuentran los parques Juan Carlos I y El Capricho). 

En esta ocasión hemos hecho una avanzadilla, casi la mitad del trayecto. Peeeeeero, aviso: a no mucho tardar, allá que iremos: hasta ese "tope" que he indicado (alguno de los dos parques citados), y, entonces, haremos 10 kilómetros de ida y otros tantos de vuelta. Para ello aprovecharemos una estación del año en que dispongamos de más horas de luz, cuando los días sean más largos (y no puedo decir que las temperaturas más altas, que si se quedaran tal y como están ahora, sería perfecto). Esto significa que, los interesados, las interesadas, han de mantenerse ligeramente en forma, para acometer ese desafío con éxito (y, si no, no pasa nada, siempre pueden volverse en metro, dado que será en fin de semana, aunque no es tan divertido, claro).

Y volviendo a nuestra bicicletada: una vez utilizado el carril bici mencionado, pasamos junto al ciclópeo Santiago Bernabeu y acometimos Concha Espina, una cuesta algo atemorizante (por el impacto visual que ofrece desde lejos) pero que, luego, es como el gigante aparente de Michael Ende en "Jim Botón y Lucas el maquinista" que cuanto más te acercas a ella, más pequeña es. Al final descubres que no tiene malicia, que es una cuesta noblota donde las haya. Casi una "cuesta aparente". Casi.

Una vez en el parque, y como el que suscribe esta crónica estaba (y aún está) recuperándose de una gripe, catarro, alergia, etc.) no pudo - para no forzar una voz que le fue robada por el rey de los grillos- encargarse de explicar quién fue el insigne naturalista que daba nombre al lugar. Para este apartado contamos con la inapreciable ayuda de un padre y una madre (de diferentes familias) que se lo habían preparado. Utilizaron algunos libros y canciones  para que la chiquillería supiera algo más de Félix. Luego, la foto de familia y, antes, mientras y después: la fascinación por el denominado "Bowl La Prospe", un cóncavo espacio skater que hizo las delicias de los y las peques al ver cómo lo utilizaban un par de diestros "hermanos" de ruedas.

De guiar el regreso se encargó otra persona (qué bien que dispongamos de adultos capaces de asumir esa responsabilidad), dado que el guía inicial se había vuelto a su cubil (para seguir negociando, con el citado rey de los grillos, la devolución de su voz). Por lo visto, dicho regreso fue magnífico.

Así que, ésta es la crónica de la bicicletada del segundo trimestre del Ignacio Zuloaga. ¿Te vendrás a la del tercero? Si es así, ya sabes: ¡ve entrenando porque pedalearemos allende los mares!







 

martes, 13 de febrero de 2024

BICICLETADA: Llega la bicicletada del segundo trimestre

Este domingo celebraremos la segunda bicicletada del curso (de las denominadas "normales", de poco kilometraje), apta para todos los públicos.

En esta ocasión, vamos a visitar un diminuto, ignorado, desconocido parque madrileño que, sin embargo, lleva por nombre el de un insigne naturalista español: Félix Rodríguez de la Fuente. 

La distancia, desde el colegio, es aproximadamente de 4 kilómetros. Por lo que, entre pitos y flautas, pedales y timbres, haremos alrededor de 10 km en total (dado que no seguiremos, íntegramente, las indicaciones de Mr. Google Maps).

¿Comidita? Sí, por si acaso. Con este tiempo locuelo, fruto del cambio climático que, según algunos, no existe, nunca se sabe si podremos comer allí o si, por el contrario, hará frío y,  tras ingerir algún tentempié, volveremos al barrio.



lunes, 29 de enero de 2024

TABLÓN: The future at your wheels, enero 2024

El futuro está en nuestras piernas pero, sobre todo, en nuestros corazones. Si nos sensibilizamos con la situación medioambiental, si decidimos ponernos en marcha (en lugar de, simplemente, quejarnos, o de echarle la culpa a otros -al fin y al cabo, el desaguisado actual es fruto de los hábitos que, como sociedad, tenemos y, entre todos, perpetuamos-), si queremos marcar una diferencia a la hora de desplazarnos, y ayudar a revertir la situación, ya sabemos lo que hay que hacer: caminar más, coger el transporte público y la bici. Por supuesto, la bici. No lo olvidemos: The future is at your (our) wheels!

PD: gracias al curso de 5ºA y a su tutora, que han hecho este sencillo pero hermoso mural (al cual no he podido fotografiar, hasta ahora, sin los reflejos de los coches aparcados: ¿metáfora de lo que se oculta tras la realidad comentada, quizás?)




DONACIONES: Una nueva, y hermosa, bicicleta. Enero 2024

Esto sí que es economía circular (o, como se decía antes: aprovechar las cosas). A una niña su bicicleta se le ha quedado pequeña, así que nos la dona y pide una de préstamo para seguir haciendo el bicibús y las bicicletadas. A su vez, la bici que le prestamos procede de otras donaciones -bien sea de familias del colegio o del taller social La Guindalera-. 

A medida que vamos acumulando bicicletas, se las damos a dicho taller. Ellos las ponen a punto y las derivan a algún colectivo desfavorecido. Todos colaboramos para que todos pedaleemos y disfrutemos. 

Con bici al Zuloaga es más que un proyecto biciclético, es un proyecto social, humano, que se hace cada vez más grande, más profundo, como las raíces de un buen árbol. 😊



lunes, 22 de enero de 2024

BAJO NUEVOS CIELOS: Como predijimos, la liamos parda, 20-1-24

Hacer una rutilla cicloturista conlleva exponerse a situaciones imprevistas, que pueden llegar a ser, en muchas ocasiones, molestas. Que se te pinche la rueda (bajo la lluvia), que te quedes sin comida o agua (y estés lejos de algún lugar donde puedas reponer), que hayas dormido fatal, que tengas malestar por estar enfermo, débil, etc. Todas son situaciones que se pueden dar, viajando en bici, y que te van a poner en un lugar nuevo. Te van a mostrar quién eres cuando las cosas se tuercen (o, al menos, quién eres ese día en concreto).

Si comienzo la narración de esta manera es porque el sábado nos encontramos, al cruzar la pasarela del Anillo Verde Ciclista que conecta con el Puente de San Fernando, con un hermosísimo barrizal. Cierto es que podríamos haberlo evitado (si la tropa hubiese sabido que existía una opción B, la limpia) pero a mí me interesaba que entrenásemos las cualidades que nos permiten afrontar las adversidades que todo cicloviajero ha de cultivar: paciencia, buen humor, compañerismo y flexibilidad. Saber adaptarse a lo que venga con la mejor sonrisa y tener ese afán de superación que te va a servir, además, para tu vida personal.





El barro no suele ser bien recibido: mancha, resbala, se introduce por todas partes. Además, conlleva tener que lavar la bici luego (o de inmediato, depende de la textura que tenga, hay barros tan densos que te bloquean la rueda al pegarse a los frenos y guardabarros). El que nos tocó a nosotros era papilloso, con un altísimo contenido de agua, resbaladizo a más no poder. Así que tuvimos que hacer gala del buen equilibrio que todo ciclista tiene y atravesar la pista marrón, a pie, empujando nuestras bicis (¡qué marrón!) Peeeeero... En unos minutos, nos encontramos en la magnífica senda fluvial del Manzanares que está prácticamente terminada y que nos llevó, en un paseo delicioso, junto a la ribera de nuestro famoso río hasta El Pardo.










A mí lo que me llegó a cansar fue que a nuestra derecha no dejasen de aparecer pistas y pistas polideportivas (Parque Deportivo Puerta de Hierro, Club El Tejar de Somontes, Federación Madrileña de Hockey Hierba, Complejo Deportivo de Somontes...) que no permitió conectar con esa sensación de estar en la naturaleza tan necesaria como saludable. ¿Lo bueno de esta situación? Pues que los peques estuvieron muy entretenidos viendo cómo se jugaba al golf, hockey, pádel, rugby, montaba en pony, etc.

El paseo al Pardo, por fin, se ha convertido, gracias a esta iniciativa -después del desaguisado que montaron con tanta autovía y carretera con nudos mil en esa zona, sin acordarse de hacer un triste carril bici segregado que rindiera homenaje a la famosísima ruta ciclista a dicho pueblo, todo un clásico-, en una manera agradable, y sin muchas complicaciones, de acceder a tan hermoso lugar. El cielo era azul, los cormoranes tomaban el sol en los árboles caídos sobre el revuelto Manzanares y, en un abrir y cerrar de ojos, llegamos a nuestro destino, donde una de las madres había reservado mesa, el día anterior, para los diecisiete que componíamos la expedición. Un bar restaurante donde nos dieron de comer abundantemente por un más que módico precio. Excelente.




Así que tocó regresar y detenernos, esta vez con más tranquilidad (pues no teníamos que llegar ya a ningún sitio a comer a una hora concreta), a observar los diferentes deportes que se practicaban en esta costanilla encajada entre el río y la carretera M-605. Pero, esta vez, cuando teníamos que abandonar la senda fluvial, sin barro, por la escalera que conduce a la puerta que lleva al campo de Rugby de Puerta de Hierro. Una vez subida, pudimos ver los trompazos, melés, lanzamientos de bestiajos y demás travesuras que, además de generar (en mi caso) sorpresa y admiración por los practicantes de rugby, también me reafirmó en la negativa que siempre sentí hacia su práctica, allá en mis años mozos.



Después vino la subida por la GR 124, la Dehesa y... Llegada al barrio. Nuestro querido Zuloaga. Habíamos salido a las 9:50 y regresábamos a las 17:30, satisfechos, tras los alrededor de 30 kilómetros pedaleados. Estupendo. ¡Muchas gracias a todos, todas, por este bonito día!



lunes, 15 de enero de 2024

BAJO NUEVOS CIELOS: Cartel de la Bicicletada a El Pardo, 20-1-24

En nuestro colegio la dimensión cicloturista sigue viva, prueba de ello es que, cada vez que convocamos una pedalada de este tipo (un poco más exigente: mayor duración, kilometraje, etc.) siempre hay un grupito de familias que, como si se encontraran frente al altar, dicen solemnemente: "Sí, quiero". Además, todos sabemos que, viniendo a ella, nos entrenamos -física y psicológicamente- para nuestra escapada de fin de semana de junio.

Por eso seguimos organizando y disfrutando propuestas de este tipo. Y que sea por muuuchos años.